"Tienes un abecedario en la cara"
fue lo último que me dijo.
no entendí muy bien
si se refería a los diferentes tonos de mi piel
a mis ojeras desnutridas
al maquillaje escupido en un orgasmo.
Poder leer poesía en mi rostro es una ventaja indiscutible.
Me inventas dormida me inventas dormida
qué belleza la calidez de las crisálidas al caer la noche
qué belleza recuperar el pasado
virar las cuerdas vocales hasta nombrarte
clavar mis uñas en el almíbar de tus sueños
conocer los pliegues ocultos de tu piel
tintinear juntos en un tejado
adornar las paredes de nuestra buhardilla
en París.
fue lo último que me dijo.
no entendí muy bien
si se refería a los diferentes tonos de mi piel
a mis ojeras desnutridas
al maquillaje escupido en un orgasmo.
Poder leer poesía en mi rostro es una ventaja indiscutible.
Me inventas dormida me inventas dormida
qué belleza la calidez de las crisálidas al caer la noche
qué belleza recuperar el pasado
virar las cuerdas vocales hasta nombrarte
clavar mis uñas en el almíbar de tus sueños
conocer los pliegues ocultos de tu piel
tintinear juntos en un tejado
adornar las paredes de nuestra buhardilla
en París.
Doblar las sábanas, hacer la cama
sólo por el placer que supone deshacerla juntos.
sólo por el placer que supone deshacerla juntos.
*
4 comentarios:
otra fotografía realmente inquietante, una foto llena de esa piel que nos recubre y nos resguarda de todo lo exterior.
la hierba me pincha
Esta fotografía me encanta. Cuanto más inquietantes mejor.
"Tienes un abecedario en la cara" también es una idea que me gusta. Me recuerda a una serie fotográfica del artista Zhang Huan en la que su cara va apareciendo cubierta de kanjis hasta estar completamente negra.
No sé si te llegarán estas palabras que recuperan esta imagen trayéndola a estos días. Ahora ya lo sabes, una de las que más me han gustado siempre. Siempre. Pero sí te llegan estas palabras, corroboro más que nunca y con más información de la debida (ahora ya lo sé), mi gusto extremo por esta fotografía de la piel... ahora me gusta mucho más, ya lo creo.
Publicar un comentario